Zapala – A un mes de las denuncias realizadas por un, ex referente del Movimiento Popular Neuquino (MPN), sobre presuntas irregularidades en la adjudicación de la obra para el nuevo edificio de la Justicia en Zapala, el caso continúa sin aclaraciones oficiales por parte de los involucrados ni de las autoridades correspondientes.
Habían cuestionado públicamente el proceso de licitación, señalando un posible conflicto de interés en el estudio de arquitectura ganador, cuyos socios serían el esposo de Tanya Bertoldi —actual diputada nacional y ex candidata a intendenta de Centenario— y el yerno de Zulma Reina, ex funcionaria judicial. Además, la hija de Reina ocupa un cargo dentro del Poder Judicial, lo que, según el denunciante, refuerza las sospechas sobre vínculos indebidos.
En sus declaraciones, reclamó que se garantice la ética en el manejo de fondos públicos y exigió que quienes están vinculados políticamente se aparten de procesos licitatorios sensibles. También destacó el entramado familiar y político detrás del caso, al recordar que Bertoldi es sobrina del actual intendente de Centenario, Javier Bertoldi.
Durante este mes, distintas voces del ámbito político y judicial se sumaron al pedido de explicaciones y una investigación formal para determinar si existieron favoritismos o irregularidades. Sin embargo, el silencio de las autoridades y la ausencia de medidas concretas alimentan la desconfianza.
La controversia reavivó el debate sobre los límites entre la política, la justicia y la obra pública en la provincia, dejando en evidencia la necesidad urgente de mayor transparencia y control en los procesos de adjudicación.
Mientras tanto, desde la sociedad y sectores opositores insisten en que se esclarezca el caso. Por ahora, las preguntas siguen sin respuesta.